Irene no sabía exactamente que tipo de tejido y corte quería para el día de su boda , pero si tenía claro que este debía ser algo etéreo y a la vez entrañable y creo que con este diseño en gasa y finas tiras de chantilly, colocadas tanto en cadera como en las mangas, podemos decir que lo conseguimos. Aquí podéis apreciar el trabajo de los puños ,que dan un toque un poco más barroco al vestido si caer en el exceso. Tanto el peinado como el maquillaje casaban a la perfección con el diseño , algo muy natural aunque no por ello perfectamente estudiado , y como complementos un velo de tul de seda de dos capas , unos preciosos pendientes vintage , una impresionante tiara y un ramo de rosas peonias blancas . La novia nos muestra esta solitario de oro blanco con diamante en talla brillante . Nos encanta esta foto del Teatro Arriaga con el Casco Viejo de Bilbao al fondo tomada desde el coche en el que la novia se dirigía hacia la maravillosa catedral de Santiago donde tuvo lugar el enlace y que os mostramos en otra instantánea . La novia estaba radiante y muy tranquila momentos antes de llegar al altar y diese comienzo la ceremonia. Estos pequeños tan ideales esperaban a la salida con cestas de pétalos para dar la enhora
